Lección 44 Octubre 31 del 2021
- Admin
- 2 oct 2021
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PARA LOS NIÑOS: “La Segunda Intervención de Bildad”
Propósito:
Mostrar a los niños que Job fue acusado injustamente de sufrir a causa de su pecado, pero esa acusación era sin fundamento. Job sufría porque estaba siendo probado.
Introducción:
En el discurso de Bildad este descarga su ira, describiendo la terrible suerte de los malos y según su pensamiento Job recibe el castigo correspondiente a su maldad. No tenía nada nuevo que decir, seguía culpando al inocente Job, así fue la segunda intervención de Bildad.
I. Al sentirse ofendido por Job, vv. 1-4
Bildad le dice a Job, si tú te callaras, nosotros entonces podríamos hablar, debes escuchar. Has estado hablando, cuando tenías que haber estado escuchando, esto era como un regaño para Job. Bildad le preguntó a Job por qué los miraba con tanto desprecio y los consideraba poco sabios. En este momento la situación entre Job y sus amigos se encontraba en un momento difícil. Estos hombres, que se habían acercado a él como amigos, ya no lo eran. Bildad le dijo a Job ¿Crees tú que Dios va a dirigir este universo de una forma que te convenga a ti? Le hacía ver que era insignificante y que no tenía tanta importancia para Dios. Pero nosotros sabemos, que, a pesar de la pequeñez del hombre, para Dios si es importante, porque recordemos que “lo coronó de gloria y de lustre, le hizo enseñorear de las obras de sus manos y puso todo debajo de sus pies” (Salmo 8.5-6).
II. Describe la condición del malvado, vv. 5-10
Bildad identifica tres clases de castigo, que los malvados acarrean sobre sí. 1) Se extinguirá la luz de ellos (Pr. 13:9). 2) La luz de su tienda se oscurecerá. 3) Se apagará su lámpara, es decir, estará rodeado de tinieblas; perderá el gozo, la seguridad y el vigor de sus pasos por sus propios errores; esto es contrario a lo que dice Proverbios 4:18 “Mas la senda de los justos es como la luz de la aurora, que va en aumento hasta que el día es perfecto; Porque la luz es para los rectos (Salmo 97:11); Los impíos serán atrapados por los lazos de la maldad, por la red que será echada en sus pies. Describe con estas palabras la condición miserable de un impío, esto es cierto, porque el pecado será la destrucción de los hombres si no se arrepienten. Pero volvemos a decir que este no era el caso de Job, porque él no era un hombre malo, solo estaba siendo probado.
III. Detalla la destrucción del impío, vv. 11-21
Bildad describe la destrucción que está reservada para los impíos, y que los alcanza en este mundo. El camino del pecado es el camino del terror, y conduce a la confusión perpetua, que comienza con los temores presentes de una conciencia intranquila. Sin duda, la muerte del impío es miserable, porque cuando fallece, le es quitado todo aquello que tenía para su futuro. La familia del impío es hundida y cortada, sus hijos perecen con él, o después de él. Y por último el juicio de Dios sigue al impío después de su muerte. Porque después que parta de este mundo tendrá confusión perpetua, será condenado en el día del juicio. Recordemos lo que dice Proverbios 10:7 “La memoria del justo será bendita: Mas el nombre de los impíos se pudrirá”.
Conclusión:
Niñitos Bildad estaba en lo cierto cuando decía que los hombres sufren por sus pecados, pero estaba equivocado al proponer esto como una explicación de los sufrimientos de Job. No todo sufrimiento es una consecuencia directa del pecado, recordemos las pruebas son permitidas por Dios para fortalecer al creyente y acrisolar su fe.
CATECISMO INFANTIL
Pregunta No. 106
¿En nombre de quién hemos de orar?
Sólo en nombre de Cristo.

