“La Angustia de Jacob”
MATERIAL BÍBLICO
1. Lecturas Diarias
Domingo: La aflicción de Agar. Génesis 21:14-20
Lunes: El llanto del Rey David. 2 Samuel 16-23
Martes: David llora a Absalón. 2 Samuel 18:29-33
Miércoles: David rasga sus vestiduras. 2 Samuel 13:30-33
Jueves: La aflicción de la viuda de Sarepta. 1 Reyes 17:17-24
Viernes: La Amargura de la Sunamita. 2 de Reyes 4:27-37
Sábado: Raquel llora por sus hijos. San Mateo 2.16-18
2. Lectura Devocional:
Salmo 119.49-56
PASAJE IMPRESO:
Génesis 37.29-36
29 Y Rubén volvió a la cisterna, y no halló a José dentro, y rasgó sus vestidos.
30 Y tornó a sus hermanos y dijo: El mozo no parece; y yo, ¿adónde iré yo?
31 Entonces tomaron ellos la ropa de José, y degollaron un cabrito de las cabras, y tiñeron la ropa con la sangre;
32 Y enviaron la ropa de colores y trajéronla a su padre, y dijeron: Esta hemos hallado, reconoce ahora si es o no la ropa de tu hijo.
33 Y él la conoció, y dijo: La ropa de mi hijo es; alguna mala bestia le devoró; José ha sido despedazado.
34 Entonces Jacob rasgó sus vestidos, y puso saco sobre sus lomos, y enlutóse por su hijo muchos días.
35 Y levantáronse todos sus hijos y todas sus hijas para consolarlo; más él no quiso tomar consolación, y dijo: Porque yo tengo de descender a mi hijo enlutado hasta la sepultura. Y llorólo su padre.
36 Y los Midianitas lo vendieron en Egipto a Potiphar, eunuco de Faraón, capitán de los de la guardia.
COMENTARIO BÍBLICO
37.29; 30 Y Rubén volvió a la cisterna…
No hay forma de justificar lo malo que se hace en la vida, ni el más grande de los remordimientos cuando un daño que parecía pequeño se convirtió en algo verdaderamente grande y de un gran impacto para la persona directamente afectada, como para el resto de la familia. Un gran dolor se había causado en el corazón de José pues sus propios hermanos se habían ensañado contra él y lo alejaban de su amado padre que ahora sufrirá por su ausencia.
37.31-34 Entonces tomaron ellos la ropa de José…
Despojaron a José de su hermosa prenda de vestir que su padre le había regalado, esta era una distinción por ser obediente y bien portado, pero nadie más podía portarla, y menos ahora cuando estaban pensando darla como evidencia de que José había sido despedazado por una fiera desapareciendo su cuerpo y dejando únicamente la túnica rota y ensangrentada, Jacob con solo ver la prenda ensangrentada se imaginó lo peor y fue grande su dolor. Amémonos de corazón como verdaderos hermanos y nunca provoquemos tan grande dolor a nuestros seres amados.
37.35-36 Y levantáronse todos sus hijos…
Qué cosa tan más terrible y cruel cometieron los hermanos de José al causarle a su padre un dolor tan grande, Jacob estaba inconsolable y no era para menos, pues su hijo ya no estaría más con él, hay muchos padres que conocen este dolor, y también hermanos que son capaces de no sentir nada ante la pena de su ser amado. Quisieron brindarle consuelo a Jacob, pero no lo acepto, tal vez muy en el fondo se imaginaba que sus propios hijos atentaron contra su propia sangre, pues él sabía la envida y el odio que le tenían a José.
TEXTO ÁUREO:
Génesis 37.34
“Entonces Jacob rasgó sus vestidos, y puso saco sobre sus lomos, y enlutóse por su hijo muchos días.”
LUCES DEL TEXTO ÁUREO
Cuando Satanás ha enseñado a los hombres a cometer un pecado, les enseña cómo ocultarlo con otro, a esconder el robo y el homicidio con mentiras y juramentos falsos; pero el que encubre sus pecados no prosperará. Los hermanos de José ocultaron el suyo y lo hicieron mutuamente por un tiempo, pero su villanía salió a la luz finalmente y aquí quedó publicada para el mundo. Para apesadumbrar a su padre, le mandaron la túnica de colores de José y al ver la túnica ensangrentada él pensó inmediatamente que José había sido despedazado. Que quienes conocen el corazón de un padre, imaginen la agonía de Jacob. Con toda bajeza sus hijos fueron a consolarlo, pero todos eran consoladores miserables e hipócritas, si realmente hubieran deseado consolarlo, lo hubieran podido hacer de una vez diciéndole la verdad. El corazón es extrañamente endurecido por el engaño del pecado. Jacob se negó a ser consolado. El gran afecto hacia una criatura prepara una gran aflicción o nos amarga cuando nos es quitada; el amor indebido termina corrientemente en pena indebida. Sabiduría de los padres es no criar a sus hijos con delicadeza, pues no saben qué dificultades pueden encontrar antes de morir.
PREPARACIÓN DE LA LECCIÓN
Punto Histórico
Tiempo:
Escrito en 1445-1405 a.C. Acontecimientos en el año 1729 a.C. aproximadamente
Lugar:
Canaán
Diccionario Bíblico
Eunuco de Faraón
El título de “oficial de la corte”, que ostentaba Potifar, se ha traducido de la palabra hebrea “sa·rís”, que significa “eunuco”, pero tiene el significado más amplio de chambelán, cortesano u oficial de confianza del trono. El “oficial de la corte [sa·rís] que tenía los hombres de guerra a su mando” durante la caída de Jerusalén en 607 a.C. era sin duda un alto funcionario del gobierno, y no una persona castrada privada de su masculinidad. (2 Re 25.19.) De igual manera, Potifar era guerrero y jefe de la guardia de corps, además de ser un hombre casado, el término aquí significa “mensajero” u “oficial” (véase 1 Reyes 22.9; 2 Reyes 8.6; 24.12) en lugar de castrado.
Verdad Central.
Cuando Rubén volvió a la cisterna y no encontró a José, se sintió perdido, llevaron al padre la túnica de varios colores de José, manchada de sangre mintiendo haberlo encontrado en el campo. Nótese cuando el diablo induce a cometer un pecado, enseña al criminal a ocultarlo con la mentira y el perjurio, pero el que encubre sus pecados no prosperará por largo tiempo. Entonces sus hijos aparentan vilmente querer consolarle En su hipocresía perversa, resultan consoladores falsos y miserables cuando podían haberle dicho, “José vive y ha sido vendido a Egipto”, así fue que Jacob no quiso recibir consuelo (v.35).
Doctrina de la Lección.
Los madianitas, sin saberlo, cumplieron el propósito divino (Gn. 50.9-20), llevando a José a Egipto (Gn.37.36; Gn.39.1), donde, después de ser humillado (Gn.39.20), fue exaltado (Gn.41.39-44 ), para dar vida a muchos (Gn.50.20). Mientras tanto, Jacob, quien había engañado a su padre para apropiarse "una bendición" (Gn.27.35), ahora fue engañado por sus hijos, haciéndole creer que José había muerto (Gn.37.31-34). Por providencia divina, José "hizo un largo viaje alejándose de casa", para cumplir los propósitos de Dios. Así también, Jesucristo, "viajó" a este mundo, para hacer la voluntad del Padre Celestial ( Jn.5.30; Jn.6.38-40; Fil.2.7-8; He.10.5-9) en nuestro favor.
BOSQUEJO: “La Angustia de Jacob”
Propósito:
Enseñar que los conflictos entre familia causan grandes problemas a los padres, para que procuremos evitarlos y promovamos la armonía y la paz.
Enseñanza Toral:
Si no detenemos el pecado a tiempo somos llevados a cometer más pecados, hasta que arruinamos nuestra vida y la de nuestra familia, como sucedió en la vida de Jacob y sus hijos.
Introducción:
Cuando los hermanos de José lo vendieron a los ismaelitas, entendemos que Rubén no estaba presente e ignoraba lo que había pasado con él. Sus hermanos actuaron a sus espaldas y ocultaron lo que habían hecho, por lo cual vinieron terribles consecuencias.
I. La Desesperación de Rubén, vv. 29-30
a) Por desconocer lo sucedido a José. Rubén fue quien propuso echar a José a la cisterna, pero estaba preocupado por la situación de su hermano. Cuando fue a buscarlo a la cisterna el solo y no lo encontró, ignorante de lo que había pasado estalló en desesperación y profundo dolor. Como expresión de esto “rasgo sus vestidos”. Esto es lo que provoca la maldad humana cuando actuamos impulsados por el odio, el rencor y deseos pecaminosos.
b) Por ser el responsable. Al no encontrar a José dentro de la cisterna, fue a donde estaban sus hermanos y les dijo “el mozo no parece; y yo, ¿a dónde iré yo? Él, como hijo mayor, sentía la obligación moral de velar por el bienestar de su hermano menor. También Jacob esperaría de él cómo hermano mayor el relato de lo que había pasado a José. También nosotros somos responsables del bienestar de nuestros hermanos en la familia y en la iglesia y debemos velar porque ellos estén bien.
c) Por haberlo descuidado. Sentía haber fallado al cumplimiento de sus deberes como hermano de José, más aún, cuando estaba consciente del peligro en que se encontraba y debió cuidarlo permanentemente. Por eso ahora al no encontrarlo en la cisterna se siente culpable de lo que le haya sucedido a su hermano. El sentido de culpa nos habla de una mala acción, nos convierte en cómplices, y esto nos hace sentir responsabilidad de los hechos. Somos responsables ante Dios de muchos males que sufren las personas que nos rodean, porque debimos haberlos protegido para que no fueran dañados. Ayudemos al bienestar de los demás.
II. Por el Engaño de sus Hijos, vv. 31-34
a) Planeado ingeniosamente. Sin importarles la angustia de Rubén sus hermanos lo desengañaron explicándole lo que habían hecho con José y le dieron la parte del dinero que le correspondía. Después se hizo cómplice con ellos al planear juntos la forma de engañar a su anciano padre. Planearon degollar un cabrito y teñir con su sangre la ropa de José. Se supone que desgarraron la ropa de José para aparentar que fue despedazado por una fiera salvaje de aquel tiempo. Notemos que cometer un pecado nos lleva necesariamente a cometer otro o más para cubrir el primero. Cuando no se tiene temor de Dios se actúa con engaño, mentira y fingimiento.
b) Con un mensaje despiadado. Antes que llegaran a casa de su padre, los hermanos de José le enviaron su ropa teñida en sangre con el cruel mensaje: “esta hemos hallado, reconoce ahora si es o no es la ropa de tu hijo”. Ellos tenían enojo contra José y Jacob, parece que esta acción fue a propósito para vengarse del favoritismo que tenía hacia José. Como podemos ver, esta acción fue cruel hacia un padre anciano y cansado de batallar con tantos problemas en la vida. Como padres ¿podemos imaginar el dolor de Jacob? Pero sus hijos tendrían las consecuencias de esta mala acción, (Prov. 30.17). Dios es justo y a su tiempo cada uno recibe conforme a sus obras.
c) Con una muerte trágica. Al ver la ropa de José inmediatamente la reconoció y supuso como era de esperar que su hijo muy amado había sufrido una muerte trágica. Desde este momento en adelante no se apartarían de Jacob pensamientos de cómo su hijo había muerto, despedazado y devorado por una bestia salvaje. Jacob quedo hundido en la tristeza y el más acerbo dolor que expresa al rasgar sus vestidos y vestirse de saco, (una tela tosca) en señal de dolor y luto. ¿Es posible que haya hijos que causen a sus padres tanto dolor y tristeza? Por lo visto sí. No seamos crueles con nuestros padres. Dios nos manda honrarlos y debemos procurarles el bienestar que merecen por ser nuestros padres.
III. Rechaza el Consuelo, vv. 35-36
a) De sus hijos e hijas. El anciano padre no quiso recibir consolación de sus hijos que con hipocresía le hablaban tratando de consolarlo al ver su dolor, pero en ningún momento le dijeron la verdad, eran solo consoladores falsos y miserables, que no se apiadaban de su padre. Tan fácil que era decirle lo que habían hecho y que José estaba vivo. Las hijas de las que tampoco quería recibir consuelo se refieren a Dina y a las esposas de sus hijos casados. De nadie recibió consuelo, porque para los padres la muerte de un hijo le produce dolor en lo profundo de su alma.
b) Porque esperaba encontrarse con él. Jacob tenía la esperanza de reunirse con su hijo un día, cuando el también muriera y fuera sepultado. En este texto la palabra hebrea Sheol se traduce sepultura y se refiere al lugar donde se creía van las almas después de la muerte, buenos y malos. Por la fe en Cristo y la enseñanza de su Palabra hoy sabemos y creemos que los hijos de Dios están en el cielo y gozan de su presencia. Allá espera Jacob estar un día con su hijo. Esta es la fe de los que creemos en Cristo como nuestro Salvador.
c) Sin saber la verdad. Después que los ismaelitas compraron a José como una mercancía que tenían que vender, lo llevaron a Egipto y lo vendieron a Potiphar, un eunuco del rey faraón. La palabra eunuco se refiere a un varón castrado, pero aquí significa que era un oficial al servicio del faraón ya que era capitán de la guardia y estaba casado. Hasta aquí llego José como esclavo, para ser instrumento de Dios en beneficio de los suyos. Nosotros ignoramos los planes que Dios tiene para nuestra vida y no entendemos por qué nos sucede esto o aquello. Aceptemos las circunstancias que el Señor nos da y roguemos nos use para su gloria.
Conclusión:
Dejemos nuestra angustia en las manos de nuestro Dios y recibamos la consolación que Él nos da, porque finalmente nos hará mucho bien.
CATECISMO MAYOR:
Pregunta108
¿Cuáles son los deberes requeridos en el segundo mandamiento?
Les deberes requeridos en el segundo mandamiento son recibir, observar y guardar puros y completos todo el culto religioso y las ordenanzas, tales como Dios las instituyó en su Palabra;[1] especialmente la oración y las acciones de gracias en el nombre de Cristo,[2] e1 oír, leer y predicar la Palabra,[3] la administración y recepción de los sacramentos,[4] el gobierno y disciplina de la iglesia,[5] el ministerio y el sostenimiento del mismo,[6] los ayunos religiosos;[7] jurar por el nombre de Dios;[8] y hacer votos a Él;[9] así como también el desaprobar, detestar y oponerse a todo culto falso;[10] y conforme al estado y llamamiento de cada uno, destruirlo así como a todos los objetos de idolatría.[11] [1] Dt.32.46, 47; Mt.28.20; Hch.2.42; 1 Ti.6.13, 14; [2] Fil.4.6; Ef.5.20; [3] Dt.17.18, 19; Hch.15.21; 2 Ti.4.2; Stg.1.21, 22; Hch.10.33; [4] Mt.28.19; 1 Co.11.23-30; [5] Mt.18.15-17; 16.19; 1 Co.5; 12.28; [6] Ef. 4.11, 12; 1 Ti.5.17, 18; 1 Co.9.7-15; [7] Jl.2.12, 13; [8] Dt.6.13; [9] Is.19.21; Sal.76.11; [10] Hch.17.16, 17; Sal.16.4; [11] Dt.7.5; Is.30.22.
ANÁLISIS SINTÉTICO: “La Angustia de Jacob” Génesis 37.29-36
1. Engañado por sus propios hijos
2. Por la supuesta muerte de José
3. Y su luto por José
4. Hasta la muerte
5. Mientras José es vendido a Potiphar en Egipto
Cuestionario
1. ¿Por qué Rubén rasgó sus vestidos?
2. ¿Qué versión dieron los hijos de Jacob acerca de la “muerte” de José?
3. ¿Por qué Jacob fue engañado por sus propios hijos?
4. ¿Qué hizo Jacob al convencerse de que su hijo José había sido devorado?
5. ¿Es correcto engañar a nuestros padres?
Enseñanzas Prácticas
1. Aunque Rubén estaba ausente cuando José fue vendido, se unió al encubrimiento; ya que sobre él recaería la responsabilidad de aquel acto de maldad por ser el hijo mayor. Amados hermanos, aunque no siempre es fácil, hablemos en todo momento con la verdad.
2. El engañador de Isaac, fue también engañado por la mentira de sus propios hijos. “Todo lo que el hombre sembrare, eso también segará” (Gálatas 6.7). Grande fue la angustia que experimentó Jacob por la mentira de sus hijos.
ILUSTRACIÓN. Accidente o incidente
Se cuenta de un pastor, quien quedó seriamente herido en un accidente de automóvil. Fue llevado al hospital, inconsciente. Al día siguiente, cuando volvió en sí, le preguntó a la enfermera por qué estaba él en aquel lugar. Procure no hablar ahora, solo descanse —le contesto ella—. Es que sufrió usted ayer un accidente. — ¿Accidente? — empezó a musitar el gran hombre de Dios—. No existen los accidentes en la vida de un cristiano. Estas cosas son accidentes para los que miran la cuestión desde fuera, pero mirando desde cerca, a la luz de la Providencia, esto es tan solo un incidente del perfecto plan de Dios para la vida de cada hijo suyo. Con esto aprendemos que, en medio de la gran angustia de Jacob nuestro Señor tuvo un plan perfecto para él y su familia; y así acontece con todos sus hijos, aún en los en los momentos más difíciles. Recordemos lo que dijo el Salvador a Pedro: “Lo que yo hago no lo entiendes ahora, más lo entenderás después”.