Lección 37. Septiembre 11 de 2022

PARA LOS NIÑOS: “Los Hijos de Isaac”

Propósito:

Enseñar a los niños que las cosas espirituales son de mayor importancia porque traen bendición y deben tener preferencia sobre los materiales.

Introducción:

Muchos de los grandes personajes de la Biblia fueron hijos de mujeres estériles, que nacieron como resultado de la contestación a las oraciones de sus padres. El Señor obró de esta manera para que los mencionados hijos fueran tenidos como una bendición especial de los cielos. Isaac amaba a Rebeca, aunque esta no podía tener hijos, pero veinte años después Dios bendijo su hogar con dos hijos. Y como cada persona desde antes de nacer ya tiene como herencia su carácter e inclinaciones que observará durante su vida, solo resta a los padres orar por los hijos para encaminarlos por el mejor camino correcto.

I. Su Nacimiento, vv. 19-26

Entre los israelitas los hijos eran considerados herencia, bendición de Dios (Sal.127.3). Isaac oró insistentemente y de una manera ininterrumpida a Dios, pidiendo que su mujer pudiera tener hijos. El Señor se lo concedió, porque su súplica fue oída por la sinceridad y fe con que fue elevada, aunque Rebeca era estéril concibió dos hijos, porque ninguna cosa es imposible para Dios (Lc.1.37). Desde antes de nacer esos dos hijos ya luchaban, por esta razón Rebeca fue a consultar a Dios, quien le reveló que dos hijos nacerían y que darían lugar a dos pueblos; que uno sería más fuerte que otro, y que el mayor serviría al menor. Y así como Dios lo indicó llegó el momento en que nacieron mellizos, el primero fue rubio y velludo y lo llamaron Esaú (velludo), el segundo carecía de las características del primero y fue llamado Jacob (suplantador), así que desde su nacimiento se perfilaban como dos personas diferentes. Isaac tenía sesenta años cuando Dios le concedió hijos.

II. De Personalidad Contrastante, vv. 27-28

La Biblia nos dice que crecieron los niños y fueron de vocación y carácter muy diferente: Esaú, cazador, del campo y el favorito de su padre; Jacob, quieto, hogareño y el favorito de su madre. Esaú como hombre inclinado a la caza de animales que abundaba en la tierra de Canaán, se deduce que llegó a ser muy diestro con el arco. Jacob por su parte fue de carácter tranquilo y dedicado al cuidado del numeroso rebaño y por lo tanto más cercano a su madre. Isaac y Rebeca cometieron un terrible error al tener preferencia por uno de los hijos. Isaac amaba más a Esaú, porque comía de su caza, pero Rebeca amaba más a Jacob. Esta preferencia a la larga distanció a los hermanos y se fue acentuando cada día más esa separación. Aparentemente existía entre ellos una competencia continua. Los padres deben amar por igual a sus hijos, para evitar muchos problemas.

III. Negociaron la Primogenitura, vv. 29-34

Esaú fue un hombre falto de piedad que no mostró interés alguno por las cosas espirituales. Ambos hermanos sabían que las promesas espirituales hechas por Dios a Abraham e Isaac, se perpetuarían en el que tuviera la primogenitura, por eso Jacob se esforzó por obtenerla. Esaú pensó más en satisfacer su necesidad física, y por un plato de lentejas vendió y menospreció su primogenitura. Por su parte Jacob obró ventajosamente aprovechándose de la necesidad y del carácter mundano de su hermano. Esaú representa a los que piensan más en las cosas materiales que en las espirituales (Mt.16.26). La Biblia dice que Esaú menospreció la primogenitura y que después con lágrimas deseó obtener las bendiciones, pero no lo logró (He.12.16-17).

Conclusión:

Niñitos Esaú, a cambio de este plato de comida, concedió su primogenitura a su hermano Jacob que consistía en: 1) Una porción doble de los bienes de su padre. 2) Al morir Isaac, Jacob sería el principal de la familia 3) Jacob sería el guía espiritual con privilegios únicos delante de Dios. La descendencia de Esaú no sería importante, en cambió Jacob sería padre de la nación escogida por Dios por medio de la cual vendría al mundo un Mesías Salvador. Y fue así como se llegó a pronunciar "Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob" el nombre de Esaú perdió importancia. Niñitos esta lección nos enseña que las cosas espirituales son de mayor importancia, porque traen bendición y deben tener preferencia sobre los materiales.

CATECISMO INFANTIL:

Pregunta No. 6

¿Hay más de un Dios?

Respuesta:

No hay sino uno solo.