“El Anuncio Profético de Jacob” (II Parte)
MATERIAL BÍBLICO
1. Lecturas Diarias
Domingo: Dan, cachorro de león. Deuteronomio 33.22.
Lunes: Eres el Dios de mi salud. Salmo 25
Martes: Espera a Dios. Salmo 42.1-11
Miércoles: Gad, como el león habitará. Deuteronomio 33.20-22
Jueves: La heredad de Aser. Josué 19:24-31
Viernes: Nephtalí, lleno de Bendición. Deuteronomio 33.23
Sábado: Bienaventurado tú, oh Israel. Deuteronomio 33.27-29
2. Lectura Devocional:
Deuteronomio 33.12-29
PASAJE IMPRESO:
Génesis 49.16-27
16 Dan juzgará a su pueblo, Como una de las tribus de Israel.
17 Será Dan serpiente junto al camino, Cerasta junto a la senda, Que muerde los talones de los caballos, Y hace caer por detrás al cabalgador de ellos.
18 Tu salud esperé, oh Jehová.
19 Gad, ejército lo acometerá; Mas él acometerá al fin.
20 El pan de Aser será grueso, Y él dará deleites al rey.
21 Nephtalí, sierva dejada, Que dará dichos hermosos.
22 Ramo fructífero José, Ramo fructífero junto a fuente, Cuyos vástagos se extienden sobre el muro.
23 Y causáronle amargura, Y asaeteáronle, Y aborreciéronle los archeros:
24 Mas su arco quedó en fortaleza, Y los brazos de sus manos se corroboraron Por las manos del Fuerte de Jacob, (De allí el pastor, y la piedra de Israel,)
25 Del Dios de tu padre, el cual te ayudará, Y del Omnipotente, el cual te bendecirá Con bendiciones de los cielos de arriba, Con bendiciones del abismo que está abajo, Con bendiciones del seno y de la matriz.
26 Las bendiciones de tu padre Fueron mayores que las bendiciones de mis progenitores: Hasta el término de los collados eternos Serán sobre la cabeza de José, Y sobre la mollera del Nazareo de sus hermanos.
27 Benjamín, lobo arrebatador: A la mañana comerá la presa, Y a la tarde repartirá los despojos.
COMENTARIO BÍBLICO
I. A Dan, Gad, Aser y Nephtalí, vv. 16-21
49.16-21 Dan juzgará a su pueblo…
“Dan iba a ganar, por artes y política y sorpresa, ventajas contra sus enemigos, como serpiente que muerde el calcañar del viajero. Jacob, casi extenuado y listo para desmayar, lo alivia con estas palabras: “Tu salvación esperé, oh Jehová”. La salvación que esperaba era Cristo, la Simiente prometida; ahora que él iba a ser reunido con su pueblo, suspira por Aquel a cuyo alrededor será la reunión del pueblo. Declara sencillamente que busca el cielo, la patria mejor, Hebreos 11. 13, 14. Ahora que va a disfrutar la salvación, se consuela por haber esperado la salvación. Como nuestro camino al cielo hay que esperar en Cristo, y el cielo, hay que esperarlo como nuestro reposo en Cristo. Es consuelo del santo moribundo haber esperado la salvación del Señor, pues entonces tendrá lo que ha estado esperando.” “En cuanto a Gad, alude Jacob a su nombre que significa ejército y anuncia el carácter de esta tribu. La causa de Dios y su pueblo, aunque por una vez pueda parecer derrotada y acabada, al final será victoriosa. Representa al conflicto cristiano. Aser debe ser una tribu rica. Su herencia bordeaba el Carmelo que era proverbialmente fructífero. Neftalí, es una cierva suelta. Podemos considerarlo como descripción del carácter de esta tribu. A diferencia del laborioso buey y del asno, está deseoso de comodidad y libertad, activo, pero más notorio por la acción rápida que por la labor constante y la perseverancia. Como el suplicante que, con palabras buenas, anhela misericordia. Que no se censuren ni envidien unos a otros los que tienen diferentes temperamentos y dones.”
49.22-26 Ramo fructífero José…
“La bendición de José es muy plena. Lo que dice Jacob de él es historia y profecía. Jacob le recuerda las dificultades y fieros dardos de las tentaciones con que anteriormente luchó. Su fe no falló, antes bien, en medio de sus pruebas llevó todas sus cargas con firmeza y no hizo nada inconveniente. Toda nuestra fortaleza para resistir las tentaciones y soportar las aflicciones viene de Dios; su gracia es suficiente. José llegó a ser el pastor de Israel para cuidar de su padre y de su familia, y la roca de Israel, su fundamento y firme soporte. En esto, como en muchas otras cosas, José fue un notable tipo del Buen Pastor y la Piedra del Ángulo probada de toda la iglesia de Dios. Las bendiciones son prometidas para la posteridad de José, típicas de las vastas y eternas bendiciones que vienen sobre la simiente espiritual de Cristo. Jacob bendijo a todos sus hijos, pero especialmente a José, “que fue apartado de sus hermanos”. No sólo separado en Egipto sino, por poseer una eminente dignidad y por ser más consagrado a Dios.”
49.27 Benjamín, lobo arrebatador: …
“Se dice de Benjamín que arrebatará como lobo. Jacob fue guiado por el Espíritu de profecía en lo que dijo y no por el afecto natural; de lo contrario, hubiera hablado con más ternura de su amado hijo Benjamín. Tocante a él solamente prevé y predice que su posteridad será una tribu guerrera, fuerte y osada, y que se enriquecerá con los despojos de sus enemigos; que serán activos. El bendito Pablo era de esta tribu (Romanos 11.1; Filipenses 3.5); en el amanecer de su día, devoró la presa como perseguidor, pero en el ocaso repartió el botín como predicador; él compartió las bendiciones del León de Judá y participó en sus victorias.”
TEXTO ÁUREO:
Génesis 49.18
Tu salud esperé, oh Jehová.
LUCES DEL TEXTO ÁUREO
En la bendición que Jacob está pronunciando, profetiza que Dan iba a ganar, por partes y política y sorpresa, ventajas contra sus enemigos, como serpiente que muerde al calcañar del viajero. Jacob, casi extenuado y listo para desmayar, la lidia con estas palabras: “tu salud esperé o Jehová”. La salvación que esperaba era Cristo, la simiente prometida; ahora que él iba a ser reunido con su pueblo, suspira por aquél a cuyo alrededor será la reunión del pueblo. Declara sencillamente que busca el cielo, la patria mejor, (Hebreos 11.13-14).
Ahora que va a disfrutar la salvación, se consuela por haberla esperado. Como nuestro camino al cielo, hay que esperar en Cristo y al cielo, hay que esperarlo como nuestro reposo en Cristo. Es consuelo del santo moribundo haber esperado la salvación del Señor, pues entonces tendrá lo que ha estado esperando.
PREPARACIÓN DE LA LECCIÓN
Punto Histórico:
Escrito entre el 1445-1405 a.C. Acontecimientos en el Año 1689 a.C.
Lugar:
De composición, en el desierto del Sinaí y las llanuras de Moab, Suceso: En Egipto
Diccionario Bíblico
Cerasta:
Del latín “ceraste” que significa cuerno víbora venenosa de África y Asia, caracterizada por sus cuernos. Reciben el nombre común de víboras cornudas, por las prominentes escamas que tienen sobre los ojos.
Verdad Central.
Dan, era uno de los hijos de las concubinas, habría de obtener ventaja sobre sus enemigos destaca en sutileza como la serpiente. Respecto a Gad, alude a su nombre que significa, tropa, que habría de ser valiente guerrero, como encontramos en 1º Crónicas 12.8. De Aser, vs. 20, dice que habría de ser una tribu muy rica llena de todo, no solo de pan para lo necesario y de cosas deleitosas y hasta exportaría a otros países, su futuro correspondería así a su nombre pues significa “felicidad”. Se dice que Neftalí (vs.21) una tribu que enfrenta luchas según su nombre con la gracia y rapidez de sus movimientos prevalecerá y escapará de las emboscadas, Barac era de esta tribu (Jue.4.6). La bendición que impartió a José es la más larga y llena, le compara (v.22) a una rama fructífera porque Dios le había hecho fructificar la en su aflicción (41,52). La bendición de Benjamín (v.27) será lobo arrebatador, sería una tribu guerrera, fuerte y atrevida que se enriquecerían con los despojos de sus enemigos, el Apóstol Pablo era de esta tribu (Ro.11.1; Fil. 3.5).
Doctrina de la Lección.
En esta sección (Gn.49.16-27) sobresale la bendición de Jacob a José. Según la profecía, sería fructífero, cumpliéndose, esto, en las obras de sus heroicos descendientes: Josué (Jos.1.10, 11), Débora (Jue.4.4), Gedeón (Jue.6.11) y Samuel (1 S.3.19). Resalta aquí que, así como José fue prosperado en medio de las adversidades, su descendencia también sería prosperada por el Omnipotente (Gn.49.25). Dios es quien hace fructificar (Jn.15.5).
BOSQUEJO: “El Anuncio Profético de Jacob” (II Parte)
Propósito:
Enseñar que Jacob tuvo bendición para todos sus hijos, conforme al plan de Dios para cada uno de ellos, para que nosotros también guiados por Dios bendigamos a los nuestros.
Enseñanza Toral:
La gracia de Dios se manifiesta dando bendición a todas las personas, pero de manera especial lo hace con sus hijos, conforme el propósito que tiene para cada uno de nosotros. Seamos obedientes al Señor y sirvamos en su Iglesia y que nos bendiga conforme su voluntad.
Introducción:
Estando presentes todos sus hijos, Jacob bendijo a cada uno de ellos. Sus bendiciones proféticas estaban de acuerdo al carácter de cada uno, pero especialmente conforme a Dios lo guio para anunciarles el fiel cumplimiento de sus palabras “en los postreros días”.
I. A Dan, Gad, Aser y Nephtalí, vv. 16-21
a) Bendición de Dan. Este patriarca fue el quinto hijo de Jacob y el primero de Bilha. Su nombre significa Juez. En relación a esto su padre le dice que “juzgará a su pueblo” como tribu de Israel. Se ve una alusión velada a Sansón, que fue de la tribu de Dan y un Juez de Israel muy prominente. La profecía respecto a él afirma que será “serpiente junto al camino” y “víbora junto a la senda” o denota sagacidad, sutileza y rapidez para caer sobre su presa. En la marcha por el desierto el campamento de Dan junto con otras tribus formaban la retaguardia. También conquistaron una posesión entre Sidón y Damasco (Jue.18.7, 28, 29).
b) Para Gad y Aser. Aunque Gad no tenía algo que lo distinguiera entre los hijos y las tribus de Israel, Jacob le menciona que será atacada por sus enemigos ubicados en las fronteras de su territorio (Jue.10.7-8). Así fue por los amonitas, filisteos y otros. Finalmente, Dios los haría victoriosos. Los hijos de Dios sufrimos, pero al final nos da la victoria (Ro.8.37). Aser tuvo bendición corta pero muy buena. Le anuncia grosura y deleites para el rey. Su territorio era de los mejores de Israel, ubicado en la costa del mar mediterráneo entre Tiro y el monte Carmelo, fértil en la producción del mejor trigo y aceite de la tierra prometida. Dios nos provee de todo lo mejor para nuestro bienestar.
c) Bendición de Nephtalí. Las palabras de la bendición de Jacob para Nephtalí son pocas, pero su padre le anuncia que dará “dichos hermosos”. Quizás hace referencia a su territorio ubicado en el norte de la tierra prometida, muy accidentado, pero de bellos paisajes. Su gente sería valiente y daría ocasión a bellos poemas, como aquellos que expresó Débora y Barac cuando obtuvo la victoria sobre sus enemigos, ayudada por Barac, de la tribu de Nephtalí (Jue.4.6, 10; 5.1). Dios nos anuncia en su Palabra el porvenir de todos nosotros.
II. La Bendición a José, vv. 22-26
a) Como hijo favorito. Jacob siempre dio a conocer a sus hijos la preferencia que tenía por José. Recordemos que era hijo de la mujer amada, por lo cual vemos que su bendición fue la más larga, comparada solo con la de Judá. Al bendecir a José parece que Jacob dejó el papel de profeta y procede a mostrar un espíritu poético, y manifiesta su grato sentir hacia él. Aquí señala el extendimiento extraordinario de esta tribu y posiblemente se refiere a que Dios lo hará fructífero en Egipto donde fue afligido. Dios favorece a sus hijos donde sea que estén; pero como José seamos temerosos de Dios en todas nuestras acciones. José sufrió mucho, pero Dios lo bendijo. Así hará con nosotros también si le tememos con todo nuestro corazón.
b) La bendición divina a José. Jacob pone a este hijo bajo cuidados y bendiciones del Rey Omnipotente, el mismo que lo había cuidado y lo había ayudado en todos sus caminos, peligros y necesidades. Jacob presenta a José perseguido y afligido en las dos tribus que surgieron de él, pero favorecidos por la gracia de Dios son triunfantes sobre toda oposición. Esto fue cierto hasta que se apartaron del camino de Dios, incluido en esto las demás tribus, porque todas cayeron en la idolatría (1R.12.26-33). Seamos fieles a Dios y procuremos que sus bendiciones se derramen en nuestra vida.
c) Mayor que la de su padre. José recibió una bendición más grande porque Jacob lo puso con preeminencia sobre sus hermanos. Recordemos que estas tribus, Efraín y Manasés, fueron grandes en número de descendientes, y Efraín fue líder en el reino del Norte, formado por diez tribus de Israel y con frecuencia fueron llamadas en las Sagradas Escrituras “la casa de José” (Amós 5.6; 10). Bendigamos a nuestros hijos y roguemos Dios que los bendiga más que a nosotros.
III. A Benjamín, v. 27
a) Para ser victorioso. Este patriarca debió ser muy querido por su padre como el segundo hijo de Raquel y ella misma le puso el nombre al morir en el parto. Nada sabemos de su carácter y sus hechos personales, se le presenta como pasivo más que activo. Sin embrago, en el principio de su historia gastó su vida y recursos en guerras pequeñas o ignominiosas, contiendas violentas e injustas (Jue.20.12, 14, 20). Claro es que Jacob habló guiado por Dios y no por su afecto natural. Así nosotros también bendigamos a todos nuestros hijos.
b) Sería tribu guerrera. La posteridad de esta tribu sería inclinada a las peleas, fuerte y atrevida contra los demás, que una ocasión por poco la exterminan (Jue. 20.48; 21.1-6). Esta fue una triste experiencia para todas las tribus de Israel y especialmente para ella. Nuestras malas acciones hacia los demás traen terribles consecuencias a nuestra vida. En su tiempo y forma Benjamín manifestó el “lobo” profético que llevaba dentro. Tengamos cuidado de nuestros actos porque en ellos manifestamos lo que somos.
c) Se enriquecería de despojos. En las batallas antiguas los vencedores se llevaban las riquezas y pertenencias de los vencidos. Esta tribu se enriquecería con los despojos de sus enemigos; fue la tribu más temida que cualquier otra. Lo vemos cuando se enfrentó a las fuerzas unidas de todo Israel. De esta tribu era el rey Saúl y ayudado por ellos se propusieron mantener su causa y se opusieron tenazmente a David (2S.3.1). Mostraron siempre un valor destemplado e indiscreto. Evitemos las guerras y proclamemos la paz (Sal. 34.14).
Conclusión:
Todas las bendiciones impartidas por Jacob a sus hijos, anunciaron su futuro y se cumplieron fielmente y lo que falte aun indudablemente se cumplirá.
CATECISMO MAYOR
Pregunta 133
¿Cuál es la razón anexa al quinto mandamiento para darle mayor fuerza?
La razón anexa al quinto mandamiento y contenida en estas palabras: “Porque tus días se alarguen en la tierra que Jehová tu Dios te da”,[1] es una promesa expresa de larga vida y prosperidad, tanto cuanto sirva a la gloria de Dios y al bien propio, hecha a todos los que guarden este mandamiento.[2] [1] Éx.20. 12; [2] Dt.5.16; 1 R. 8. 25; Ef. 6. 2, 3.
APLICACIÓN DE LA LECCION
ANÁLISIS SINTÉTICO | “El Anuncio Profético de Jacob II” Génesis 49.16-27
1. Dan juez y serpiente. Vencería a enemigos más fuertes
2. Gad se sobrepondría a sus enemigos
3. Aser proporcionaría alimentos para el palacio. Nephtalí tendría capacidad militar y cánticos de victoria
4. Por la bendición del Omnipotente José era prosperado a pesar de las adversidades
5. Revela el carácter bélico de Benjamín
Cuestionario
1. ¿Qué significa el nombre Dan? ¿Cuál fue el fin de Dan?
2. ¿Qué anuncio se dio para Gad y Aser?
3. ¿Qué dichos hermosos daría Nephtalí?
4. ¿Cuál fue la procedencia de todas las bendiciones de José?
5. ¿Por qué Benjamín es llamado lobo arrebatador?
Enseñanzas Prácticas
1. La bendición de Jacob revela la vida futura de cada hijo, pareciera que toma como base para sus declaraciones el carácter de ellos. Aunque esto es evidente en este anuncio, siempre debemos recordar que es Dios el que guía y pone los medios para revelar los hechos futuros.
2. Como apreciamos en nuestro pasaje bíblico, la mayor atención en la bendición de Jacob es para Judá y José. De este último se dice: “Ramo fructífero junto a la fuente”; palabras que indican crecimiento y prosperidad aun en medio de sufrimientos y conflictos.
ILUSTRACIÓN. Él sabe tu nombre
Una queja común es que con la llegada de las computadoras nos sentimos frecuentemente despersonalizados. Tratamos más y más con máquinas desprovistas de rostro que no nos conocen como individuos, sino como números. Marwin Rosenthal, en libro titulado “Israel my Glory”, nos cuenta de un padre que estaba contestando a un funcionario del censo acerca de cuantos hijos tenía. Él respondió: —Bueno, son Guillermo, Enrique, Martha y… —Déjese de nombres —interrumpió el funcionario—. Deme el número de ellos. El hombre indignado, replicó: —No tienen número, señor. Tienen nombre y me gusta recordarles, visitarles como tales, porque cada uno tiene sus cualidades y todos ellos son muy queridos para mí. Jacob conocía a cada uno de sus hijos por nombre, y así los bendijo. Esto nos enseña que nuestro Salvador conoce a cada una de sus ovejas, y a cada una las llama por su nombre.