“Los Descendientes de Esaú”
MATERIAL BÍBLICO
1. Lecturas Diarias
Domingo: Juicios de Dios sobre Edom. Abdías 1-21
Lunes: La mano de Dios sobre Edom. Ezequiel 25.12-14
Martes: Esaú vende su Primogenitura. Génesis 25.29-34
Miércoles: Los cuatro pecados de Edom. Amos 1.11-12
Jueves: Acuérdate oh Jehová de los Hijos de Edom. Salmos 137.7
Viernes: De Edom así ha dicho Jehová. Jeremías 49.7-22
Sábado: Ninguno sea profano como Esaú. Hebreos 12.14-17
2. Lectura Devocional:
1º Crónicas 1.35-54
PASAJE IMPRESO:
Génesis 36.1-43
1 Y estas son las generaciones de Esaú, el cual es Edom.
2 Esaú tomó sus mujeres de las hijas de Canaán: a Ada, hija de Elón Hetheo, y a Aholibama, hija de Ana, hija de Zibeón el Heveo;
3 Y á Basemath, hija de Ismael, hermana de Navaioth.
4 Y Ada parió á Esaú á Eliphaz; y Basemath parió á Reuel.
5 Y Aholibama parió á Jeús, y a Jaalam, y a Cora: estos son los hijos de Esaú, que le nacieron en la tierra de Canaán.
6 Y Esaú tomó sus mujeres, y sus hijos, y sus hijas, y todas las personas de su casa, y sus ganados, y todas sus bestias, y toda su hacienda que había adquirido en la tierra de Canaán, y fuése a otra tierra de delante de Jacob su hermano.
7 Porque la hacienda de ellos era grande, y no podían habitar juntos, ni la tierra de su peregrinación los podía sostener a causa de sus ganados.
8 Y Esaú habitó en el monte de Seir: Esaú es Edom.
9 Estos son los linajes de Esaú, padre de Edom, en el monte de Seir.
10 Estos son los nombres de los hijos de Esaú: Eliphaz, hijo de Ada, mujer de Esaú; Reuel, hijo de Basemath, mujer de Esaú.
11 Y los hijos de Eliphaz fueron Temán, Omar, Zepho, Gatam, y Cenaz.
12 Y Timna fué concubina de Eliphaz, hijo de Esaú, la cual le parió á Amalec: estos son los hijos de Ada, mujer de Esaú.
13 Y los hijos de Reuel fueron Nahath, Zera, Samma, y Mizza: estos son los hijos de Basemath, mujer de Esaú.
14 Estos fueron los hijos de Aholibama, mujer de Esaú, hija de Ana, que fué hija de Zibeón: ella parió á Esaú á Jeús, Jaalam, y Cora.
15 Estos son los duques de los hijos de Esaú. Hijos de Eliphaz, primogénito de Esaú: el duque Temán, el duque Omar, el duque Zepho, el duque Cenaz,
16 El duque Cora, el duque Gatam, y el duque Amalec: estos son los duques de Eliphaz en la tierra de Edom; estos fueron los hijos de Ada.
17 Y estos son los hijos de Reuel, hijo de Esaú: el duque Nahath, el duque Zera, el duque Samma, y el duque Mizza: estos son los duques de la línea de Reuel en la tierra de Edom; estos hijos vienen de Basemath, mujer de Esaú.
18 Y estos son los hijos de Aholibama, mujer de Esaú: el duque Jeús, el duque Jaalam, y el duque Cora: estos fueron los duques que salieron de Aholibama, mujer de Esaú, hija de Ana.
19 Estos, pues, son los hijos de Esaú, y sus duques: él es Edom.
20 Y estos son los hijos de Seir Horeo, moradores de aquella tierra: Lotán, Sobal, Zibeón, Ana,
21 Disón, Ezer, y Disán: estos son los duques de los Horeos, hijos de Seir en la tierra de Edom.
22 Los hijos de Lotán fueron Hori y Hemán; y Timna fué hermana de Lotán.
23 Y los hijos de Sobal fueron Alván, Manahath, Ebal, Sepho, y Onán.
24 Y los hijos de Zibeón fueron Aja, y Ana. Éste Ana es el que descubrió los mulos en el desierto, cuando apacentaba los asnos de Zibeón su padre.
25 Los hijos de Ana fueron Disón, y Aholibama, hija de Ana.
26 Y estos fueron los hijos de Disón: Hemdán, Eshbán, Ithram, y Cherán.
27 Y estos fueron los hijos de Ezer: Bilhán, Zaaván, y Acán.
28 Estos fueron los hijos de Disán: Huz, y Arán.
29 Y estos fueron los duques de los Horeos: el duque Lotán, el duque Sobal, el duque Zibeón, el duque Ana.
30 El duque Disón, el duque Ezer, el duque Disán: estos fueron los duques de los Horeos: por sus ducados en la tierra de Seir.
31 Y los reyes que reinaron en la tierra de Edom, antes que reinase rey sobre los hijos de Israel, fueron estos:
32 Bela, hijo de Beor, reinó en Edom: y el nombre de su ciudad fué Dinaba.
33 Y murió Bela, y reinó en su lugar Jobab, hijo de Zera, de Bosra.
34 Y murió Jobab, y en su lugar reinó Husam, de tierra de Temán.
35 Y murió Husam, y reinó en su lugar Adad, hijo de Badad, el que hirió a Midián en el campo de Moab: y el nombre de su ciudad fué Avith.
36 Y murió Adad, y en su lugar reinó Samla, de Masreca.
37 Y murió Samla, y reinó en su lugar Saúl, de Rehoboth del Río.
38 Y murió Saúl, y en lugar suyo reinó Baalanán, hijo de Achbor.
39 Y murió Baalanán, hijo de Achbor, y reinó Adar en lugar suyo: y el nombre de su ciudad fué Pau; y el nombre de su mujer Meetabel, hija de Matred, hija de Mezaab.
40 Estos, pues, son los nombres de los duques de Esaú por sus linajes, por sus lugares, y sus nombres: el duque Timna, el duque Alva, el duque Jetheth,
41 El duque Aholibama, el duque Ela, el duque Pinón,
42 El duque Cenaz, el duque Temán, el duque Mibzar,
43 El duque Magdiel, y el duque Hiram. Estos fueron los duques de Edom por sus habitaciones en la tierra de su posesión. Edom es el mismo Esaú, padre de los Idumeos.
COMENTARIO BÍBLICO
36.1-14 Y estas son las generaciones de Esaú…
Efectivamente Dios también bendijo a Esaú, aunque no de la forma como lo hacía con Jacob, y comenzó Esaú a desarrollarse como familia, crecieron sus hijos y tuvo nietos y más, y su hacienda fue muy grande también, y optó Esaú por apartarse de Jacob lo más posible, las costumbres de Jacob de alguna manera afrentaban a Esaú y su familia porque mientras la Familia de Jacob era temerosa de Dios, ellos en tanto eran paganos e idólatras sin duda alguna, para ellos el Dios de Abraham y de Isaac no significaba nada, aunque sin reconocerlo los bendecía también. Aunque el hombre por su parte muestra ingratitud e indiferencia, Dios mientras tanto permanece fiel y cumple sus promesas.
36.15-19; 40-43 Estos son los duques de los hijos de Esaú…
Parte del cumplimiento de las promesas de Dios para con los descendientes de Abraham, es la prosperidad que refleja la descendencia de Esaú, alcanzado renombres para sus príncipes, reconocidos en todos los alrededores y hasta las grandes ciudades. Algo verdaderamente contrastante, pues mientras ellos crecían en todos los aspectos, Jacob y su familia sufrían la esclavitud en Egipto, a veces pareciera que los hijos de Dios estamos limitados que no prosperamos, que no somos reconocidos en el mundo, pero eso es vanidad y nada aprovecha, lo que realmente importa es lo que habremos de recibir de nuestro Dios en el reino de los cielos, aunque gran parte aquí en la tierra sea de sufrimiento.
36.20-39 Y estos son los hijos de Seir Horeo…
Describe al pueblo que tanto Esaú como su descendencia derrotaron para finalmente tomar el control de su tierra natal (Dt.2:12). Estas personas eran conocidas como los Horeos (Gn.14.6), quienes eran descendientes de un hombre llamado Seir. Después de la conquista de Esaú, la región se empezó a conocer como Edom Aquí se describe las generaciones de Esaú, centrándose en la genealogía y los gobernantes de la tierra de Edom. En repetidas ocasiones, el capítulo enfatiza que Esaú es Edom, repitiendo así algo que ya se había dicho anteriormente (Gn.25.25, 30). El pueblo edomita son sus descendientes. Las regiones de la tierra de Edom llevan el nombre de su descendencia. El capítulo se desvía brevemente para ofrecer la genealogía del pueblo Horeo (Gn.14.6) el cual ocupaba la tierra antes de que fuera conquistada (Dt.2.12). Finalmente, el capítulo enumera a ocho reyes de Edom, junto con los jefes cuyos nombres se asociaban con las regiones que ocupaban sus clanes.
TEXTO ÁUREO:
Génesis 36.1
“Y estas son las generaciones de Esaú, el cual es Edom.”
LUCES DEL TEXTO ÁUREO
Estas son las generaciones de Esaú, el cual es Edom. El pueblo edomita desciende de Esaú el hijo de Isaac y hermano gemelo de Jacob. Esaú tomó sus mujeres de las hijas de Canaán. Abraham había determinado que Isaac no tomara mujer entre las hijas de Canaán (Génesis 24.37). El matrimonio de Esaú con mujeres cananeas les causó mucho dolor a Isaac y a Rebeca. Y Esaú tomó sus mujeres, sus hijos y sus hijas y todas las personas de su casa, sus ganados, todas sus bestias, y todo cuanto había adquirido en la tierra de Canaán, y se fue a otra tierra separándose de Jacob su hermano; porque los bienes de ellos eran muchos y no podían habitar juntos, ni la tierra en donde moraban los podía sostener a causa de sus ganados, y Esaú habitó en el monte de Seir, Esaú es Edom. El grito de Esaú a Isaac: ¿no tienes más que una bendición padre mío? Dios bendijo a Esaú porque era un descendiente de Abraham, y lo bendijo en la única forma que realmente le importaba: lo material.
PREPARACIÓN DE LA LECCIÓN
Punto Histórico
Tiempo:
Escrito en el 1445-1405, acontecimientos en el año1715 A.C. aproximadamente
Lugar:
Canaán
Diccionario Bíblico
Duque:
Título característico de los jefes de tribus de Edom hasta la época de Moisés (Ex. 15.15, “príncipe”, “caudillo”), y conocido también en ugarítico alrededor de la misma época. En Josué 13.21 del hebreo nāsı̂ḵ (que a veces se ha traducido “duques”) es “príncipes” de Sehón.
Idumea:
Era una región del levante mediterráneo, ubicada al sur de Judea y del mar Muerto, habitada tradicionalmente por el pueblo semita de los edomitas o idumeos.
Verdad Central.
En cuanto a Esaú, se le llama Edom (rojo). En los versículos 1-8 nombre con el que se perpetuó la memoria de aquel insensato trato con el que vendió su primogenitura por ese rojo, ese guisado rojo, dice Hebreos 12.16-17. En cuanto a sus mujeres y los hijos que le dieron en tierra de Canaán, se hace un recuento detallado desde el versículo 10 hasta el versículo 19, en cuanto a su traslado al monte Seir, era el país que Dios le había dado en posesión, cuando reservó para la descendencia de Jacob la tierra de Canaán. Dios mismo lo reconoce mucho después “yo he dado por heredad a Esaú el monte de Seir” (Dt.2.5; Jos.24.4).
Doctrina de la Lección.
Génesis 36 dedica sus líneas a los descendientes de Esaú (que es Edom según Gn.36.1, 8, 43), mostrando la fidelidad de Dios (Nm.23.19), quien prometió hacerlo cabeza de una nación (Gn.25.23). Conforme al decreto eterno, en el cual "Dios ha prefijado los términos de la habitación del hombre" (Hch.17.26, Jos.24.2-4), Esaú estableció su residencia en Seir, donde sus descendientes desplazaron a los habitantes originales (Horeos) (Dt.2.12).
BOSQUEJO: “Los Descendientes de Esaú”
Propósito:
Enseñar que Dios cumple las promesas que nos hace, como lo hizo Abraham e Isaac en la vida de Esaú para que veamos su fidelidad y confiemos en Él.
Enseñanza Toral:
Las relaciones naturales de Esaú, como familia de Abraham e Isaac, pero específicamente por las promesas que Dios hizo a estos patriarcas, fueron el motivo de las bendiciones temporales que Dios le dio a Esaú aun cuando este se apartó de su camino.
Introducción:
De acuerdo con el patrón usual del libro de Génesis, cuando se va a presentar una etapa diferente en la historia, primero se completa la historia colateral de la familia, aunque sea brevemente, para después retomar la corriente principal de los acontecimientos. Así tenemos aquí algunos datos históricos de Esaú y sus descendientes.
I. Sus generaciones, vv. 1-14
a) Los hijos de Aholibama. Esaú tuvo tres mujeres mencionadas bajo nombres distintos, como era costumbre muy reconocida en los tiempos bíblicos, que la misma persona tuviese varios nombres. Así Aholibama es Judit, “hija de Beeri Hetheo” (Gn.26.34 a), aunque también se diga que es “hija de Ana, hijo de Zibeón el Heveo”. Es evidente que, en aquella mezcla de habitantes en tan reducido territorio, una persona podía ser Hetheo, Heveo, Horeo y Cananeo a la vez. Aholibama fue la mujer que tomó cuando tenía cuarenta años de edad y tuvo con ella tres hijos, Jeús, Jaalam, y Cora, v. 5.
b) El hijo de Ada. Esta es conocida también como Basemath, “hija de Elón el Hetheo”. También era cananea conocida como hetheas y mencionada como una de las primeras mujeres de Esaú. Ada y Aholibama como nueras de Isaac y Rebeca, les causaron graves problemas que amargaron la existencia de los dos. Esto sucede comúnmente cuando los hijos se casan con personas que no tienen la misma fe y carecen del temor de Dios (Gn.26.34, 35). Por esta razón Rebeca no quería que Jacob se casara con una de esas mujeres (Gn.27.46). Ada solamente dio a luz un hijo y le puso por nombre Eliphaz el cual también tuvo cinco hijos con su esposa, Temán, Omar, Zepho, Gatam y Cenaz. Con Timna su concubina tuvo uno de nombre Amalec. Procuremos la santidad en el matrimonio.
c) El hijo de Basemath. De ella se hace referencia como “hija de Ismael” y también se le conoce como Mahalet, “hija de Ismael”. Esta mujer la tomo Esaú por capricho con la mala intención de hacer enojar a su padre (Gn.28. 8-9). En su carácter personal Esaú fue profano o irreligioso irrespetuoso a sus padres por carecer del temor de Dios, interesado solamente en sus apetitos. De Basemath tuvo Esaú solo un hijo de nombre Revel, que a su vez tuvo cuatro hijos: Nahath, Zera, Samma y Mizza. Esaú tomo sus mujeres con sus hijos y su hija las cuales no se mencionan por nombre como era costumbre de los hebreos y se fue la monte de Seir por necesidad de sostén de su ganado, vv. 6-8. Roguemos a Dios nos guie en busca del bienestar de la familia.
II. Príncipes y Caudillos, vv. 15-19; 40-43
a) De los hijos de Eliphaz. Los ya mencionados hijos de Eliphaz a los cuales se agrega otro de nombre Cora, no mencionado den la lista anterior, vinieron a ser cabezas o jefes de capitanías, la palabra duque puede traducirse también como jefe. Los hijos de Esaú, igual que los hijos de Jacob fueron divididos por tribus. Aquí encontramos siete caudillos en la tierra de Edom, que le fue divinamente cedida como tierra de su posesión (Jos.24.4 a). Dios en su misericordia bendijo a los descendientes de Esaú por amor a su padre Isaac y a su abuelo Abraham.
b) De los hijos de Reuel. Como ya se dijo, los hijos de Reuel fueron Nahath, Zera, Sama y Miza. Ellos también fueron los duques o jefes descendientes de la línea de Reuel que ocuparon su lugar en la tierra de Edom. Los edomitas tomaron sus nombres de los hijos de Esaú y formaron grandes tribus o grupos donde el jefe tenía soldados a sus órdenes para su defensa y sus luchas bélicas, pues a Esaú le había sido profetizado por su padre Isaac que viviría por su espada (Gn.27.39-40). Dios cumple sus promesas de bendición para sus hijos de manera especial.
c) De los hijos de Judit. Estos descendientes de Esaú por medio de su mujer de nombre Aholibama, como ya dijimos, también fueron grandes duques o jefes de grupos de familias edomitas; ellos son: Jeús, Jaalam, y Cora. Grande fue el ascenso que tuvo el valiente y mundano Esaú en la tierra de su adopción, para que sus hijos llegaran a ser caudillos o príncipes de aquella tierra, ocupada anteriormente por Seir Horeo. Esaú fue el primero en prosperar antes que Jacob en familia, poder y riquezas, pero se apartó del camino de Dios. Ningún éxito en las cosas materiales y los placeres del mundo compensará el fracaso en la vida espiritual. Evitemos que esto nos suceda.
III. Los Horeos y los Reyes en Edom, vv. 20-39
a) Los hijos de Seir. De este hombre solo sabemos que fue padre de los Horeos, los cuales vivían en esa tierra desde antes que Dios llamara a Abram (Gn.14.6). El calificativo Horeo parece indicar que vivían en cuevas, las cuales abundan en aquel territorio peñascoso y en las sierras de Edom, especialmente en la ciudad de Sela, o Petra (2 R.14.7; Abd.2.3). los hijos de Seir fueron: Lotán, Sobal, Zibeón, Ana, Disón, Ezer y Disán. Ellos también fueron duques en la tierra de Edom. Aunque parece que entre los descendientes de Seir y Esaú había relación de amistad y parentesco al principio, Esaú los conquistó (Dt.2.22). Dios en su misericordia le permitió estas conquistas. Recordemos que nuestro poder viene de Él.
b) Los nietos de Seir. También los hijos de los hijos de Seir son insertados en la genealogía de los edomitas aunque eran nativos de aquella tierra y llamados cananeos o heteos. Los nietos de Seir fueron Hori, Hemán, Alván, Manahath, Ebal, Sepho, Onán, Aja, Ana, Disón, Aholibama, Hemdán, Eshbán, Ithram, Cherán, Bilhán, Zaaván, Acán, Huz y Arán; veinte nietos en total. Esta genealogía nos hace reflexionar sobre el caos en que vivían los descendientes de Esaú, por los matrimonios mixtos que contrajeron con ellos al vender su primogenitura y mezclarse con estas gentes. Ana descubrió que de la cruza del asno y la yegua se producen los mulos. Esta y otras es una cruza de animales prohibida por Dios, (Lev. 19.19).
c) Los reyes de Edom. Se cree que el poder real de los reyes que se mencionan no fue después de los ducados, sino que existían contemporáneamente a partir de algún momento. Así encontramos que hubo ocho reyes en Edom: Bela, Jobab, Husam, Adad, Samla, Saúl, Baal- anán y Adar. Parece que estos reyes llegaban al trono por elección, no por sucesión hereditaria. Antes que hubiera reyes en Israel, incluso cuando aún no entraba a la tierra prometida, en Edom ya había reyes, (Núm. 20.14). Así podemos ver que mientras los de Jacob estaban en casa de siervos, los de Esaú vivían en buenas mansiones. Suele suceder que mientras los hijos del mundo tienen todo a la mano, los hijos de Dios lo tienen en esperanza. Debemos ser pacientes y esperar el cumplimiento de sus promesas a su debido tiempo.
Conclusión:
Dios les dio bendiciones temporales a los descendientes de Esaú en hora temprana, pero perdieron las eternas al apartarse del Señor. Esto no sucederá si caminamos con Dios en la fe de nuestro Salvador y le servimos con fidelidad.
CATECISMO MAYOR:
Pregunta 105
¿Cuáles pecados prohíbe el primer mandamiento?
Los pecados prohibidos en el primer mandamiento son el ateísmo, esto es negar a Dios o no tener ninguno[1]; la idolatría, o el tener o adorar muchos dioses, o algún otro como el verdadero Dios o en lugar de Él[2]; el no tenerlo ni confesarlo como Dios y como el nuestro[3], la omisión o negligencia en alguna cosa debida a Él, requerida en este mandamiento[4], la ignorancia[5], olvido[6], falsas aprehensiones[7], opiniones erróneas[8], pensamientos indignos y malvados con respecto a Él[9], investigaciones curiosas y atrevidas tocante a sus secretos[10], toda impiedad[11], odio a Dios[12]; amor a sí mismo[13], egoísmo[14] y todos los demás estados desordenado e inmoderados en nuestra mente, voluntad o afecto sobre otras cosas que nos aparten de Él en todo o en parte[15]; credulidad vana[16], incredulidad[17], herejía[18], error[19], desconfianza[20], desesperación[21], incorregibilidad[22], e insensibilidad bajo sus juicios[23], dureza de corazón[24], orgullo[25], presunción[26], seguridad carnal[27], tentar a Dios[28]; usar medios ilícitos[29]; y confiar en los lícitos[30]; goces y delicias carnales[31]; un celo corrompido, ciego e indiscreto[32]; tibieza[33] y frialdad en las cosas de Dios[34], alejarnos y apostatar de Dios[35]; orar o dar algún culto religioso a los santos, ángeles o a alguna otra criatura[36]; todo pacto o consulta con el diablo[37] y seguir sus sugestiones[38]; hacer a los hombres señores de nuestra fe y conciencia[39]; menospreció y desdén de Dios y de sus mandamientos[40]; resistiendo o entristeciendo a su Espíritu[41], descontento o impaciencia por sus disposiciones, acusándole de locura por los males que nos manda[42], atribuir la alabanza de algo bueno que seamos, tengamos, o hagamos, a la fortuna[43], a los ídolos[44], a nosotros mismos[45], o a alguna otra criatura[46]. [1] Sal. 14. 1; Ef.2. 12 [2] Jer.2. 27, 28 compare con 1 Ts.1. 9 [3] Sal. 81. 11 [4] Is. 43. 22-24 [5] Jer. 4. 22; Os.4. 1, 6 [6] Jer. 2. 32 [7] Hch.17. 23, 29 [8] Is. 40. 18 [9] Sal. 50. 21 [10] Dt. 29. 29 [11] Tit. 1. 16 He. 12. 16 [12] Ro. 1. 30 [13] 2 Ti. 3. 2 [14] Fil.2. 21 [15] 1 Jn. 2. 15, 16; 1 S. 2. 29; Col. 3. 2, 5 [16] 1 Jn. 4. 1 [17] He. 3. 12 [18] Gá.5. 20; Tit. 3. 10 [19] Hch.26. 9 [20] Sal. 78. 22 [21] Gn.4. 13 [22] Jer.5. 3 [23] Is. 42. 25 [24] Ro. 2. 5 [25] Jer. 13. 15 [26] Sal. 19. 13 [27] Sof.1. 12 [28] Mt. 4. 7 [29] Ro. 3. 8 [30] Jer. 17. 5 [31] 2 Ti. 3. 4 [32] Gá.4. 17; Ro. 10. 2; Lc.9. 54, 55 [33] Ap. 3. 16 [34] Ap. 3. 1 [35] Ez. 14. 5; Is. 1. 4, 5 [36] Ap. 19. 10; Col. 2.18; Ro. 1. 25 [37] Lv. 20. 6; 1 S. 28. 7, 11 compare con 1 Cr. 10. 13, 14 [38] Hch.5. 3 [39] 2 Cor. 1. 24: Mt. 23. 9 [40] Dt. 32. 15; 2 S. 12. 9; Pr. 13. 13 [41] Hch.7. 51; Ef.4. 30 [42] Sal. 73. 2, 3, 13-15, 22; Job 1. 22 [43] 1 S. 6. 7-9 [44] Dn. 5. 23 [45] Dt.8:17; Dn.4. 30 [46] Hab. 1.16
APLICACIÓN DE LA LECCION
ANÁLISIS SINTÉTICO: “Los Descendientes de Esaú” Génesis 36.1-43
1. Con sus mujeres cananeas
2. Crecieron materialmente
3. Esaú y su familia se separan de Jacob
4. Llegaron a ser jefes o duques
5. Se mezclaron con gente pagana
Cuestionario
1. ¿Esaú, hizo la voluntad de Dios al tomar mujeres cananeas?
2. ¿Por qué Esaú se separó de Jacob?
3. ¿Dónde habitaron después de separarse?
4. ¿Cuál fue la diferencia entre los descendientes de Esaú y Jacob?
5. ¿Qué es mejor, la prosperidad material o la espiritual?
Enseñanzas Prácticas
1. Porque la hacienda de ellos era grande, y no podían habitar juntos. Esaú es el primero en crecer en familia y fortuna. Y las condiciones atestadas para el pastoreo y asentamiento llevaron por fin a Esaú a decidir desplazarse permanentemente a Edom, donde ya había establecido una base.
2. Los hijos de Esaú eran jefes o duques, cuando los hijos de Jacob eran simples pastores. La promesa de Dios a Jacob empezó a obrar más tarde, pero su efecto permaneció más tiempo. Esto nos debe hacer recordar lo que nos dice la Palabra Santa en Colosenses 3.1-3.
ILUSTRACIÓN. La religión en casa
Un joven, miembro de una iglesia, fue hallado en un baile público por otro joven no creyente. Al expresarle este su extrañeza por tal encuentro, respondióle el aludido: —He dejado mi religión en casa. Años más tarde, este joven que se entregó a la mundanalidad y se apartó completamente del Señor. Se dice que él y la familia que formó fueron muy exitosos en los negocios seculares; pero lamentablemente alejados de las cosas celestiales. La descendencia de Esaú nos presenta a grandes príncipes; pero la mayoría de ellos sólo fueron grandes en las cosas del mundo, no en las del Señor.
